Seguramente has participado en cursos para mejorar tus comunicaciones en el entorno laboral. A pesar de esto, en tu empresa se siguen presentando problemas en este aspecto que dificultan la consecución de resultados, un ambiente agradable y productivo de trabajo.
Comunicarse adecuadamente sigue siendo uno de los mayores desafíos que enfrentan las organizaciones y es difícil abordar el problema porque después de varias formaciones no se logran cambios significativos.
¿Por qué fallan las capacitaciones de comunicación?
En nuestra experiencia de más 25 años en temas de desarrollo, las fallas son un reflejo de cómo las personas y las empresas subestiman el problema.
- Las personas suponemos que sabemos comunicarnos bien.
La mayoría de la gente asume que el problema está en los demás y en ocasiones ni siquiera notan el efecto que genera en otros. Es más grave todavía cuando pasa (y con frecuencia) en los líderes. Entonces, cuando participan en talleres para mejorar su comunicación sienten que les dicen algo que saben y pierden interés por aprender - La organización entrega la misma solución para todas las personas.
Adicionalmente, está la forma como han abordado el entrenamiento en estos temas masivamente, es decir, una misma capacitación para todos o a través de intervenciones aisladas que no tienen seguimiento, no permiten la aplicación, continuidad y evolución en las habilidades de comunicación.
La solución a esta situación es primero encontrar un camino para identificar los tipos de problemas de comunicación que se presentan en la empresa y posteriormente aplicar las claves para desarrollar un programa de comunicaciones efectivo.
El camino para identificar los problemas de comunicación
De acuerdo con nuestra experiencia, hemos logrado clasificar los diferentes problemas de comunicación que presenta las personas en las organizaciones en 5 tipos: asertividad, efectividad, retroalimentación, delegación y persuasión.
Esta clasificación está ordenada por el grado de dificultad y el nivel de responsabilidad de las personas.
En la descripción de los tipos de problemas encontrarás los comportamientos a mejorar y el impacto negativo que generan en las organizaciones.
- Asertividad: Falta de asertividad en la manera de expresarse generando conflictos constantes que afectan el clima laboral y el compromiso de los colaboradores.
- Efectividad: Comunicaciones no efectivas que impiden o demoran el logro de los objetivos propuestos por falta de claridad y contundencia en los mensajes y van desde correos electrónicos, reuniones o presentaciones que no generan acciones.
- Retroalimentación: Ausencia del reconocimiento, mala retroalimentación, con poca frecuencia, afecta la forma de lograr los resultados y no estimula el desarrollo de las personas
- Delegación: Falta de claridad en la delegación de tareas que genera reprocesos, poca autonomía de las personas y demoras en el logro de los resultados.
- Persuasión: Dificulta movilizar e influir en otros sin apelar a la jerarquía y lograr acuerdos con las personas, las áreas e incluso otras empresas.
Las 3 estrategias para generar un programa efectivo de comunicación
Ahora que tienes una estructura para identificar los diferentes problemas de comunicación que existen en la empresa, puedes generar un programa que permita evolucionar las habilidades de comunicaciones desde colaboradores a líderes.
Un programa efectivo debe estar estructurado por niveles y de acuerdo con la responsabilidad de los participantes.
El beneficio principal, comparado con un taller de comunicaciones, es que incrementa el nivel de autoconciencia de los participantes logrando enganchar y comprometerlos con su desarrollo continuo.
Las claves para generar este programa son:
1. Hacer un autodiagnóstico que incremente la consciencia.
Con el autodiagnóstico, cada persona, encuentra sus oportunidades particulares de mejora, generando consciencia y haciendo relevante aprender del tema.
Es clave que este autodiagnóstico permita detectar a un nivel de detalle suficiente cuáles son las fallas. Así podrá adaptar un programa de entrenamiento que se enfoque en “corregir” esos comportamientos específicos.
El diagnóstico preciso debe ser capaz de identificar, por ejemplo, “mejorar la capacidad de escucha” en lugar de “hay un problema de comunicaciones”.
2. Desarrollar un programa de capacitación personalizado.
Así la persona siente que está enfocado en lo que necesita y ve valor del esfuerzo que está haciendo para aprender, lo conecta con sus retos, se incrementa el compromiso y se logran mayores cambios en comportamientos.
3. Capacitar en el momento que se necesita y dejar herramientas concretas.
Esto permite que las personas resuelvan sus retos de comunicación en la cotidianidad logrando mayor nivel de aprendizaje y obteniendo herramientas concretas que pueden aplicar inmediatamente.
Como consecuencia las personas, y especialmente los líderes, se enfocan en lo que realmente necesitan, mejor conexión con los demás, mayor colaboración y desarrollan nuevas habilidades que los acercan más fácilmente a lograr resultados a través de otros.
En conclusión, cuando se desarrollan habilidades de comunicación a través de un programa continuo que permite la evolución en el tiempo, se logra un desarrollo integral y constante de los colaboradores.
Se fortalecen sus competencias de acuerdo con su nivel de responsabilidad y generan una cultura donde la comunicación se vuelve un habilitador para el logro de los resultados con un excelente clima laboral.
Ingresa tus datos para que te ayudemos a crear el programa de comunicaciones efectivo para tu empresa.
